Pues ya estoy aquí de nuevo, con una receta que mis amigas me llevan pidiendo desde hace mucho, mucho tiempo, la receta del bizcocho de calabaza, el que hago siempre, siempre, desde que me lo descubrió mi amiga Elsa. Me encanta y encanta a los demás, por lo fácil que es hacerlo, por lo jugoso y rico que es y por lo mucho que aguanta tiernecito.
Lo de Bundt Cake es porque lo he horneado en un molde especial de bundt, que son moldes con forma de corona, con un agujero central por donde circula el aire caliente durante el horneado. Los hay con muchas formas distintas, y los originales y buenos, buenísimos, están registrados por la empresa Nordic Ware. La verdad es que son un caprichito, y aunque no son baratos y en mi caso, nada aptos para mi mini-cocina, supongo que en un futuro no muy lejano alguno caerá, María Lunarillos los tiene ideales, pero hasta que llegue ese día me seguiré apañando con mi molde de silicona de Lékué.
Una cosita importante, hay que poner el molde en el horno encima de una rejilla y no encima de la bandeja del horno, para que así circule bien el aire.
Como veis le puse chocolate fundido por encima, riquísimo. Si hacéis un bizcocho lo podéis cortar por la mitad y rellenarlo de ganache de chocolate o nutella.
Os animo a hacerlo y probarlo, éxito asegurado, ya me contaréis.
Un besazo enorme. Y graaaaaciiiiiaaasssss...